La canción es la forma claramente definida más pequeña de la música actual, en la que se integran elementos musicales que pueden conformar un concepto complejo que mezcla sonidos con palabras, o simplemente son un medio para la transmisión de un mensaje vocal. En cualquier caso, no podemos definir el impacto de un artista o de un músico sólo por su desempeño en canciones, puesto que sería como evaluar al pintor por uno de sus trazos, o al director de cine por una sola escena. Así que, por más tentador que sea, las canciones no son parámetros reales para identificar a los músicos más creativos. Sin embargo, dado que la radio (y sus múltiples descendientes, hasta llegar a las playlists actuales) se ha encargado de querer convencernos de que sí es así, y dada la trascendencia individual que pueden llegar a tener las canciones sobre nosotros, he elegido 10 canciones de la década de los sesenta que considero son las que más me gustan, las que más llenan mis criterios de lo que es la buena música, y que considero, han trascendido de mayor y mejor manera durante las 5 décadas subsiguientes.
10. "Light My Fire" - The Doors
La canción insignia de las puertas, fue uno de los temas más exitosos de la banda, y por supuesto, uno de los mejores. La canción es un tour de force que nos lleva de un punto A, calmado y melódicamente accesible, a un punto B extenuado y súmamente enérgico, en el que lo trascendente es el trayecto musical entre estos dos puntos, que nos lleva por sinuosos y maravillosos parajes sonoros, que a pesar de su complejidad, son absolutamente memorables e inolvidables.
9. "God Only Knows" - The Beach Boys
En el momento en el que surgió la mayor inspiración de Brian Wilson, fue cuando compuso esta pequeña obra maestra, que más allá de su excesivamente romántica letra, lo destacado son las múltiples armonías logradas con un número pocas veces apreciado número de instrumentos que formaron parte de la canción. Si a ello le aunamos las de por sí maravillosas armonías vocales de los boys, más unas melodías exquisitas y un destello de creatividad e ingenio jamás visto hasta ese entonces, tenemos como resultado la canción que le voló los sesos a Paul McCartney. Por un brevísimo instante, los Beach Boys fueron la banda más creativa del planeta.
8. "Cyprus Avenue" - Van Morrison
Luego de la separación de Them, el irlandés Van Morrison decidió incursionar como solista, con un estilo más, digamos, folk pop. Estilo que en esta canción no está, puesto que en el álbum del que se extrae, Morrison decidió experimentar con los sonidos del jazz, y mezclarlos con su folk predefinido, para crear una mezcla exquisita, compleja, e increíblemente emotiva que daría como resultado, entre otras, esta maravillosa canción, una tan entrañable como desafiante, y que a mi parecer, se trata de la mejor canción de toda su extensa carrera.
7. "Strawberry Fields Forever" - The Beatles
Ya decíamos anteriormente que Brian Wilson fue el líder de la banda más creativa del mundo, por un breve instante. Ello terminó cuando una mañana, Wilson iba en su automóvil de camino al estudio para grabar con los Beach Boys, cuando el locutor de la radio presentó la flamante nueva canción de los Beatles, titulada "Strawberry Fields Forever". Wilson detuvo el automóvil para escuchar la canción detenidamente, y tras 4 minutos de música, se dio cuenta que debía renunciar a la música. Ya no había nada más que hacer, los Beatles lo habían hecho todo. Se retiró de su carrera musical por varias décadas. Y es que así de genial, brillante e inigualable es esta obra de arte musical.
6. "All Tomorrow's Parties" - The Velvet Undergroun & Nico
El famoso artista plástico Andy Warhol reclutó en 1967 a una banda de rock vanguardista radicada en Nueva York, y les financió su primer álbum con la condición de que aceptaran a la cantante alemana Nico en sus filas. A regañadientes, la banda aceptó, y el resultado fue uno de los mejores álbumes de rock de la historia, y justamente esta canción es la que yo considero que es la mejor de dicha obra. Una canción aparentemente lineal, pero con muchos matices emotivos y musicales, que nos hacen estremecer mientras la gruesa voz de la alemana nos cuenta las dificultades que tiene una chica para elegir su atuendo para todas las fiestas que tendrá el día siguiente. Un ejercicio meramente artístico, vanguardista y que, aún a nuestros días, no suena avejentado ni mucho menos.
5. "Tomorrow Never Knows" - The Beatles
Esta es la canción que lo detonó todo. Si bien, ya había indicios de la cultura psicodélica/ácida en algunos rincones de la Gran Bretaña, fue a través de la música de la banda más popular a nivel mundial (más popular que Jesucristo) que llegó a todos los rincones del orbe. 3 minutos de música hipnótica, con frases profundas y una ambientación entre hinduísta y lisérgica, la banda hizo un sinfín de experimentaciones en el estudio de grabación que pusieron a trabajar horas extra a los ingenieros de sonido, al grado de inaugurar muchas de las técnicas que hoy en día son de lo más comunes, como el uso de sampleos y loops, que en ese entonces eran físicamente corte-y-pega que le hacían a las cintas de grabación, insertando sonidos de aves, instrumentos al revés y otros sonidos distorsionados. El resultado, la canción más alucinante de la historia del rock, la que lo inició todo.
4. "Bridge Over Troubled Water" - Simon & Garfunkel
De tanto en tanto, a los músicos les llega una oleada de inspiración que viene de algún lugar desconocido. Si tienen suerte, la enfocarán lo suficiente para hacer una canción, y si tienen aún más suerte, esa canción será de buena calidad. Pero sólo a unos cuantos músicos contados, les llega de forma tal, que la canción resultante es un auténtico trabajo celestial. Fue el caso de Paul Simon, quien hizo una de las canciones más bellas de toda la historia de la humanidad (sí, a ese grado) y tuvo el acierto de dejar que su compañero de mil batallas, Art Garfunkel, llevara la batuta vocal. Una canción celestial, un regalo del cielo, un destello del reino de los cielos, en 5 minutos de hermosa música.
3. "A Day In The Life" - The Beatles
Y hablando de inspiración divina, aquí no fue sólo en una canción, sino en todo un álbum: el multi aclamado Sargento Pimienta (Sergeant Pepper's) de los Beatles, el cual de forma magistral culmina con esta pequeña sinfonía, una canción en constante crescendo que, en el momento del clímax máximo, estalla con el sonido de 3 pianos simultáneos, tocando una misma nota. La coda perfecta para una obra maestra musical, una obra maestra que terminó por ser la insignia de la cultura popular del siglo XX, y el pináculo de la revolución cultural más importante desde hace algunos siglos. Ni más, ni menos.
2. "Good Vibrations" - The Beach Boys
Antes de retirarse de la música por casi 40 años, Brian Wilson nos dejó su última pieza maestra, una minisuite de surf barroco, con los elementos característicos de la banda: las armonías vocales perfectamente elaboradas, los sonidos provenientes de un sinfín de instrumentos, y una emotividad sin igual en todo el rock norteamericano. Así tenemos esta obra que es absolutamente universal, que sin importar de donde o de cuando seas, la escuchas y la disfrutas, al nivel que sea. Podrás sólo cantar el coro, podrás apreciar los cambios constantes de ritmos y ambientaciones, o incluso podrás apreciar cada nota en cada tiempo, con cada armonía, melodía incrustada en el ritmo en el que se sostiene la obra, todos, invariablemente todos nos contagiamos de las "buenas vibras" de esta canción perfecta.
1. "Like A Rolling Stone" - Bob Dylan
Esta no sólo la considero como la mejor canción de los sesenta, para mí, es la mejor canción de toda la historia del rock. Un compendio de todo lo que se debe hacer en este sagrado género musical, con una base rítmica sólida, unas armonías que incluyen instrumentos insignia del género, como las guitarras, las percusiones y los órganos, una melodía contundente y memorable, una voz rasposa que no necesariamente debe ser la más virtuosa, pero sí la más sincera en su cantar, y por supuesto, una letra contracultural, que en este caso destroza inmisericordemente a la aristocracia y a la clase alta de la sociedad con una astucia y una gracia poética digna de un premio Nobel. La mejor canción de rock de todos los tiempos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario