viernes, 27 de noviembre de 2020

15 joyas de Genesis

 


Genesis fue una de las bandas fundamentales del rock progresivo británico de la primera mitad de los años setenta. Fue una banda cuyo estilo sinfónico folk se destacaba por su preciosismo, complejidad y precisión al ser interpretada. A pesar de su relativa juventud (entre 21 y 26 años de edad de los integrantes en las canciones de esta lista), su capacidad como compositores y como intérpretes los colocó como una de las bandas fundamentales de uno de los subgéneros del rock más complejos y laureados de la historia. Aquí mis 15 canciones preferidas de esta histórica banda. 


15. "Harlequin" del álbum Nursery Cryme de 1971

Extraída de su tercer álbum, esta canción es una exquisitez bucólica y hermosa cantada a dueto por Peter Gabriel y el entonces recién llegado Phil Collins. La base musical son 3 guitarras tocadas al unísono: una guitarra de 12 cuerdas, interpretada maravillosamente por Tony Banks, más una guitara acústica tocada por Mike Rutherford y la guitarra eléctrica tocada por Steve Hackett (también recién llegado). La pieza es muy breve y poco progresiva, pero su hermosura inconmensurable la hace ser una de mis preferidas de la banda. 


14. "Dance On A Volcano" del álbum A Trick Of The Tail de 1976

Se trata del primer álbum sin la figura líder de Peter Gabriel, en donde Phil Collins asume en su totalidad el rol protagónico de la banda, y en donde se empezaría a distanciar del sonido clásico progresivo de la banda, sobre todo en los 3 discos antecesores. Aún así, las reminiscencias de esa época aún están presentes en esta pieza con tintes épicos y con interesantes cambios de ritmo. Es cierto que se percibe una mayor intención de accesibilidad al escucha, pero los puntos altos de la canción son bastante sublimes y bien logrados.


13. "Seven Stones" del álbum Nursery Cryme de 1971

Una canción muy emotiva que ronda peligrosamente en los tintes poperos, pero que se libra de ellos gracias a los cambios atmosféricos en las distintas secciones de la canción. Si bien, la estructura es convencional (estrofa-coro-puente-estrofa-coro-fin), la inventiva atmosférica contrastante, sobre todo en los dos coros, le da un toque de originalidad y distinción. Además, el sonido constante del melotrón le añade puntos de belleza y emotividad.


12. "The Lamia" del álbum The Lamb Lies Down On Broadway de 1974

Extraída de su álbum más ambicioso, que además era conceptual, esta canción representa una de las principales características de la banda, su teatralidad e histrionismo en las letras. Si bien, resulta un poco confuso qué parte de la historia de Rael (protagonista del concepto del álbum) se está contando, nos podemos centrar fácilmente en la música, en su dramatismo y en esa hermosa base de piano que acompaña a la canción, y que nos hará estremecer por su sensibilidad y facilidad melódica. Una belleza absoluta.


11. "Watcher Of The Skies" del álbum Foxtrot de 1972

Con esta canción abre uno de sus discos más icónicos, el que muchos consideran que fue el primero de su triada perfecta. La canción tiene una intro de melotrón muy oscuro y grave, que da pie a la melodía principal, sustentada en un ritmo vertiginoso que parece ametralladora, y que nos volará un poco los sesos, si no estamos del todo preparados. La canción alcanza tintes apocalípticos, y al final nos quedamos con el deseo de más. 


10. "The Battle Of Epping Forest" del álbum Selling England By The Pound de 1973

Una auténtica epopeya musical, la batalla del bosque Epping es una narración moderna sobre una batalla que toma elementos medievales en su letra, y que en su música tiene una estructura muy compleja, que a primer escucha no se va a poder distinguir precisamente por la cantidad de elementos que la conforman. Con una cierta dosis de humor, y con un nivel instrumental altamente virtuoso y de altura, la canción se destaca en un álbum lleno de canciones épicas y majestuosas. 


9. "The Carpet Crawlers" del álbum The Lamb Lies Down On Browdway de 1974

En este álbum la banda ya tenía un nivel de exquisitez y sofisticación en sus composiciones que, en ese rubro, nada le envidiaba a bandas como Pink Floyd. Dato increíble, más aún si consideramos que los integrantes de la banda tenían entre 23 y 24 años de edad. Ese altísimo nivel de sofisticación se percibe en esta canción, la cual es abiertamente pop, pero no es un pop malo, como el que la banda misma desarrolló en los años ochenta, es un pop de altura, como el de los Beatles. Las atmósferas que se logran con el uso de sintetizadores sutiles y guitarras de doce cuerdas, acompañan el manejo perfecto de la voz que hace Peter Gabriel en toda la canción. Esa primer sección, antes de la entrada de las percusiones, es escalofriantemente bella. 


8. "The Cinema Show" del álbum Selling England By The Pound de 1973

Otro portento de canción, se trata de una obra romántica dividida en dos secciones claramente definidas. La primera es una sección bucólica, renacentista, con ambientación folk lograda con la guitarra de 12 cuerdas, y en donde se nos narra en la letra la historia de amor principal, la cual pasa a segundo plano por la belleza explícita de la música. Sin embargo, en un punto, la música se rompe para dar pie a la segunda parte de la obra. Una parte futurista,  casi techno, con sintetizadores coloreando el lienzo, con una sección rítmica vertiginosa y maravillosamentre controlada por Phil Collins, y en donde los músicos se dan rienda suelta. En esta sección final, está la que considero es la melodía más celestial que he escuchado en canción alguna. 


7. "The Musical Box" del álbum Nursery Cryme de 1971

La primer gran canción de Génesis, es la que abre el tercer álbum, y es una majestuosidad absoluta. Cambios de ritmo, secciones contrastantes que van de lo romántico a lo vertiginoso, y de lo sensible a lo altamente progresivo, además de un Peter Gabriel inspirado en la voz, y un sentido armónico supremo, que combina sonidos y melodías de forma perfecta para crear un ambiente de epicidad y que cierra épicamente en ese final apoteósico de la canción. 


6. "The Colony Of Slippermen" del álbum The Lamb Lies Down On Broadway de 1974

La base rítmica que prácticamente está creada con un órgano Hammond, en vez de un bajo o batería, será el primer elemento que podamos destacar y apreciar de esta monumental obra. Luego, evidentemente, la obra tendrá cambios de ritmo y momentos sublimes, la mayoría de ellos generados con los sintetizadores de Tony Banks. Pero ese Hammond que nunca dejamos de escuchar, es tan hipnótico y genial que es capaz de ser el soporte principal durante los 8 minutos de canción, casi en su totalidad. De entre todas las canciones "histriónicas" de la banda, creo que ninguna alcanza las alturas de esta delicia. 


5. "Dancing With The Moonlit Knight" del álbum Selling England By The Pound de 1973

La operística canción de apertura del que considero es su mejor álbum, es una vertiginosa pieza, con momentos sumamente sensibles y con rupturas importantes que le dan un aire más caótico a la canción. Más allá de sus letras con una cierta carga política, la música no es para nada solemne con el escucha, le lleva por pasajes brillantes y oscuros, caminos lisos y sinuosos, y emociones suaves y pesadas. Estos contrastes y contrapuntos constantes hacen que los 8 minutos de canción se nos pasen en un suspiro. 


4. "Back In NYC" del álbum The Lamb Lies Down On Broadway de 1974

Una muestra más de la avanzada sofisticación musical que llegó a alcanzar la banda, siendo ya, en este sentido, vanguardista. Esta canción lo confirma. Los sintetizadores suenan más elegantes, menos ásperos, y toda la melodía, que a su vez está perfectamente armonizada con una guitarra muy sutil, se construye sobre una base rítmica que, sin ser presuntuosa, tiene un nivel de complejidad bastante alto ( en 7/8), sobre todo en los breves interludios. Como cereza del pastel, la poderosa voz de Peter Gabriel, a quien le escuchamos cantar como si la vida se le fuera en ello. Creo que no hay una canción de Genesis tan adelantada a su tiempo, como esta. 


3. "Supper's Ready" del álbum Foxtrot de 1972

La obra cumbre de Genesis, tanto en lo musical como en lo creativo. Una suite majestuosa de 23 minutos de duración, con secciones perfectamente definidas, cada una con identidad propia y dentro de la línea musical de la banda. No se puede decir mucho sobre una obra de este tamaño. 23 minutos sin desperdicio, con músicos inspirados y momentos musicales majestuosos. Mis secciones favoritas son la hermosa inicial "Lovers Leap", la vertiginosa "Ikhnaton and Itsacon and Their Band of Merry Men" y la alucinantemente compleja "Apocalypse In 9/8" con todo y su deliciosa y bucólica intro. Sí, es una obra maestra del rock en su totalidad.


2. "In The Cage" del álbum The Lamb Lies Down On Broadway de 1974

Una prueba más del avance de la banda, de su evolución hacia sonidos mucho más sofisticados, mucho mejor tratados y momentos de mayor emotividad. La canción es un constante ascenso, un tour de force, con breves momentos de descanso, pero que siempre mantiene una tensión constante, gracias al ritmo punzante e incesante que no da tregua alguna. Sólo en los breves interludios, en donde Tony Banks nos vuela los sesos con esas intrincadas, ingeniosas y maravillosas melodías con los sintetizadores y órganos., podemos hallar breves descansos a la tensión insignia de la canción. Sólo me bastó escuchar una vez esta canción para rendirme ante ella, ante su majestuosidad y perfección.


1. "Firth Of Fifth" del álbum Selling England By The Pound de 1973

Aún recuerdo el día exacto en el que escuché esta canción por primera vez. Tendría 20 o 21 años, y estaba en euforia porque recientemente había descubierto el rock progresivo. Este disco aparecía como uno de los mejores del género (que lo es) y decidí bajarlo y escucharlo. Las notas iniciales de piano, que aún me estremecen, me volaron los sesos en aquel día, no podía creer que una canción pudiera tener esa introducción. Fue lo primero que me asombró de la canción, y lo segundo fue el solo de guitarra de Steve Hackett. Desde ese momento me enamoré de la canción, del álbum, de Genesis como banda progresiva.